A espaldas de la catedral, en la calle de Nezahualcóyotl número 4, se encuentra uno de los tesoros culturales mejor guardados de Cuernavaca: el Museo Brady. Este recinto es la antigua residencia de Robert Brady, un coleccionista estadounidense que en 1961 compró la propiedad y adornó la casa con una colección que comprende más de mil 300 piezas de arte, desde pintura, escultura, grabado y artesanías de todo el mundo. Entre los pequeños tesoros que ahí puedes admirar se encuentran obras de reconocidos pintores como Rufino Tamayo, Frida Kahlo, Diego Rivera, María Izquierdo, Miguel Covarrubias, Francisco Toledo, José Guadalupe Posadas, entre muchos otros.

En esta ecléctica muestra de arte no distinguirás de tendencias ni escuelas de arte, sólo un sentido del gusto muy bien definido que abarca cada rincón de la casa, donde podrás admirar arte plumario mexicano, alfombras persas, un mosaico bizantino de Ravenna, cristos de Puerto Rico, oleos coloniales peruanos, diversas piezas de origen africano como máscaras, tótems y demás figurillas humanas.

Texto de http://www.visitmexico.com/

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